fotos de Ismael Francisco, colega de Cubadebate |
La
gente, en las calles de mi ciudad, olvidó que escasean los huevos, que los
precios de la carne de cerdo siguen altos y que si no se apresuran en buscar la
papa en los mercados agropecuarios estatales, pueden quedarse sin el preciado
alimento, pues en esta campaña se sembraron menos hectáreas del tubérculo…
La
gente, en las calles de mi ciudad, solo habla de pelota. Y es que los
Cocodrilos, el equipo que comanda Víctor
Mesa (VM32) está empecinado en llevarse el campeonato de este LIII
Serie Nacional de Béisbol en Cuba.
Algarabía sin igual distingue a cada partido
que trasmite la Televisión Nacional, y los que no trasmite también…
Hay que entender que en mi país todo el mundo
se cree con capacidad e inteligencia para dirigir a una novena en el terreno, y
los comentarios que se escuchan son variados. Unos están de acuerdo con la
alineación que decide VM32, otros difieren del pitcher abridor o de un relevista, los más
quieren que todo el que vaya a batear zumbe la pelota por arriba de la cerca…
A los muchachos del Matanzas no hay quien los
atrape, tienen ímpetu en el terreno, juegan con entusiasmo y van siempre por
más. Dan que hablar cada vez que salen a defender el rojo de la camiseta. Se
desenvuelven con elegancia y disciplina, sin dejarse provocar por gestos obscenos
de algunos contrincantes que, verdaderamente, dejan mucho que desear.
Tengo un vecino fanático del equipo de Villa
Clara, que si la cosa sigue como va, habrá que llevarlo infartado para el
hospital…
Reconocer que los equipos lo están dando todo
en el terreno constituye mérito. La pasión por el deporte nacional es
ilimitada, cada juego se disfruta como si fuera el último que decide al
campeón.
Veo a la gente feliz por las calles de mi
ciudad, escucho trompetas a toda hora, de día o de noche y eso son augurios de
un buen final.
Con lo único que no estoy de acuerdo es con
las cosas
feas que están pasando. Por ejemplo este domingo 30 de marzo, en Villa Clara,
después que concluyó el tercer partido, parece que lo que no pudieron hacer los
azucareros en el terreno trataron de hacerlo otros en contra de los matanceros
que fueron a apoyar a su equipo.
Lamentable de veras. Se trata de la pelota,
no puede confundirse… y qué decir de nuestros queridos colegas y narradores
deportivos que no pueden evitar parcializarse, exagerar lo que hace cualquier
equipo y minimizar todo lo que hacen los estelares jugadores de VM32. ¡Ay! la
pelota…
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