La Plataforma Songa Mercur en medio de la bahía de Matanzas (fotos de William Alejandro Hernández) |
Esa es la primera expresión que vino a la
boca de mucha gente cuando vio en medio de la bahía de Matanzas, a unos 100
kilómetros al este de La Habana, la gran mole de acero, impresionante,
impactante.
El rum rum se escucha en la parada de los
ómnibus, en la esquina de la bodega y en el malecón que circunda todo el
litoral de mi linda ciudad de ríos y puentes. Otros aseguran que hubo un
derrame de hidrocarburos, otros abren los ojos desmesuradamente y se encogen de
hombros, como quien dice: _Y a mí que me importa!!
Pero se trata de la Plataforma
Petrolera de Exploración “Songa Mercur”, perteneciente a la empresa rusa
Zarubezhneft, fondeada en la bahía de esta ciudad, que aplazó
las labores de exploración en la costa norte del centro de la Isla y se
mantiene a buen resguardo de turbonadas veraniegas, en medio de la rada
matancera hasta su próximo traslado hacia otras regiones del mundo.
Algunos colegas ya estuvieron merodeando por
allí; pero sus gestiones fueron infructuosas, debido a que las principales
fuentes de información estaban ocupadas en la complejísima maniobra de la
anclada.
Esta mañana me recibió en su oficina el Capitán
Román Hernández Santana, Práctico Mayor del Puerto de Matanzas y director de la
Unidad Empresarial de Base Prácticos
Centro-Norte quien comentó que las
maniobras para conducir a la plataforma hasta su refugio y el posterior fondeo
de entre 60 y 120 metros de profundidad, constituyó experiencia primera e
inolvidable.
Otro ángulo de la majestuosa plataforma petrolera de exploración |
Aseveró el Práctico Mayor del puerto de
Matanzas que fue una maniobra lenta y compleja por constituir embarcación
atípica, de gran volumen y requirió de todo el personal especializado, dos
remolcadores, además del Skaudi Emerald, barco de la empresa rusa utilizado
para el fondeo.
Cuatro
anclas de unas 10 toneladas de peso fueron tiradas al fondo del mar, luego de
exactos cálculos para no desviar el rumbo y procedimientos cautelosos en aras
de que la plataforma, de aproximadamente 99 metros de eslora por 64 metros de
manga, no perdiera la comunicación satelital.
Apasionado por la labor de estos días el
experto graduado como Ingeniero Navegante, contó que el trabajo inició a las
seis de la mañana del viernes último y concluyó pasadas las ocho de la noche.
Lo cierto es que la Plataforma “Songa Mercur” se ve imponente desde cualquiera
de los puntos cardinales que conducen a la bahía.
Pareciera una carroza carnavalesca en las
noches. Desde la ventana norte de mi cuarto se aprecia con luces multicolores y
llama la atención a curiosos y a otros no tanto…
Hernández Santana aseguró que lo más apasionante
y novedoso está por venir, y refirió el momento en que se trasladará la “Songa
Mercur” hacia aguas profundas del océano para continuar viaje, pues requerirá
de un buque-dique de grandes dimensiones y acciones más complicadas.
Varios remolcadore intervinieron en el fondeo de la plataforma |
En los próximos días aparecerá en el
horizonte matancero el barco Hawk, de unos 234 metros de eslora, encargado de transportar
a la plataforma, acción que debe extenderse por más de 20 horas, y que por su
complejidad solicitará máxima atención de los expertos, algo que no quita el
sueño al Capitán Román.
Mientras seguirá el rum rum entre los que no
escuchan la radio, ni ven la Televisión, porque ya, por suerte, los medios
locales difundieron el suceso, como verdadera atracción en medio de la bahía de
la Gentil Yucayo.
El barco rojo (a la izquierda) es el remolcador Skaudi Emerald de la empresa rusa |
Jajaja, buena esta... es que la bahía de Matanzas parece a veces muerta. Por eso ver un barco o esta plataforma es todo un suceso. Ojalá lleguen días en que en nuestra bahía anclen más barcos... y que no se hundan como la famosa flota de la plata.
ResponderEliminarY te sigo, y jamás apareció tu comentario en mi blog... parece que problemas de conexión cuando lo publicaste.